A pesar de nuestra buena voluntad, un estilo de vida saludable y activo, una dieta equilibrada, nuestro cuerpo experimenta cambios graduales durante el envejecimiento, debido a múltiples factores, siendo el más importante la desaceleración gradual del metabolismo y el juego de las hormonas. Las formas cambian, el tamaño se hace más grueso, el vientre se redondea, las «michelines» se desbordan de los pantalones, las nalgas se caen y así sucesivamente.
Afortunadamente, la ciencia nos está ayudando a controlar estas situaciones incómodas a través de tecnologías y modalidades cada vez más sofisticadas que destruyen selectivamente las células grasas para remodelar el cuerpo y deshacerse de las molestas y antiestéticas protuberancias o estimular la formación de colágeno para un mejor engrosamiento y estiramiento de la piel.
La tecnología adoptada por una clínica estética para la remodelación de la silueta es CoolSculpting y su principio de funcionamiento es la criolipólisis o la destrucción de las células grasas por frío. Este procedimiento hace que las células grasas sean destruidas por el frío sin dañar la piel, sin tener que recurrir a la cirugía y la anestesia. Además, no es necesaria la convalecencia, ya que inmediatamente después del tratamiento, se puede reanudar el curso normal del día.
Este proceso utiliza aplicadores de diferentes formas y tamaños para adaptarse perfectamente a la forma de las zonas de tratamiento y garantizar un resultado uniforme. Una vez cristalizadas, las células grasas son eliminadas gradualmente por el cuerpo en las semanas y meses siguientes al tratamiento. Las células que no han sido removidas se condensan, reduciendo el espesor de la capa de grasa y dando como resultado una silueta refinada.
Puede ser necesario repetir el tratamiento en el caso de áreas de grasa más grandes. Para obtener mejores resultados, a veces es aconsejable combinar las sesiones de CoolSculpting y Venus Legacy. De esta forma, pretendemos remodelar el cuerpo y reafirmar la piel en pocas sesiones de tratamiento.
Venus Legacy utiliza la radiofrecuencia y los pulsos magnéticos como fuentes de energía para estimular la proliferación de los fibroblastos, las células responsables de la formación de colágeno. El colágeno es el componente de la piel que garantiza la firmeza y la flexibilidad. Como resultado de este tratamiento de medicina estética, las fibras de colágeno se engrosan y acortan, lo que favorece la firmeza de la piel.
Este tratamiento se ofrece en forma de un protocolo de sesiones semanales durante ocho semanas consecutivas. El mantenimiento de los resultados requiere un seguimiento regular en sesiones ocasionales. Es un tratamiento sin dolor y sin efectos secundarios significativos.
Las nuevas aplicaciones de un producto inyectable de larga duración utilizado para el rejuvenecimiento facial se están volviendo cada vez más populares para la remodelación del cuerpo. Se trata de utilizar ácido L-poliláctico o Sculptra para restaurar el volumen y la firmeza de varias zonas del cuerpo, incluyendo los glúteos, la zona por encima de la rodilla, la cara interna de los muslos y los brazos, el escote, el cuello, etc.
Por lo general, se necesitan de 3 a 4 sesiones, con un intervalo de 6 a 8 semanas para obtener los resultados esperados que, con el tiempo, durarán de 2 a 3 años. Se requerirán sesiones ocasionales para mantener los resultados. Las sesiones de tratamiento son seguras y sólo tienen unos pocos efectos secundarios a corto plazo. Los más comunes son los moretones y la sensibilidad local.